miércoles, 1 de mayo de 2013

EMPANADILLAS DE POLLO AL HORNO

Hoy es el día del trabajo y ayer el restaurante Celler de can Roca fue votado el mejor del mundo y precisamente por estas dos razones me he puesto farruco y he decidido darme un homenaje y dedicar la mañana a labores culinarias.

Tengo un amigo argentino que es un figura en la cocina; Diego Ezequiel Bianchi, (así se llama el prenda) tiene uno de los blog más visitado de todo el Cono Sur con un nombre de lo más sugerente Contacto con lo divino; en él destila sabiduría y buen hacer y cuelga unas recetas de chuparse los dedos y relamerse hasta hacerse daño, con una fotos espectaculares y una didáctica que ya para sí quisieran muchos maestros. Hace un par de meses colgó unas empanadillas de lujo y copiándole la receta se las hice a mi familia con rotundo éxito, oreja, rabo y vuelta al ruedo entre aplausos,  tanto que periódicamente me instan a repetirlas. Hoy es el día con el aliciente de que he convencido a mi hija para que me sirva de pinche y así le voy metiendo el gusanillo en el cuerpo.

Empanadillas sin freír, para hacer dieta.

Va por todos ustedes:

Comenzamos fileteando 500 gramos de pechuga de pollo y haciendo bastoncitos con ella. Perol al fuego con su correspondiente aceite de oliva, salpimentamos al gusto y a darles un par de vueltas durante dos o tres minutos, simplemente para que se pongan blanquitas y se mantengan jugosas, pero sin hacerlas mucho porque luego se acabaran de hacer en el horno.
A los tres minutos le añadimos tres dientes de ajo bien picados y un par de minutos más dando vueltecitas. Retiramos del fuego y reservamos.

El pollo con sus ajitos picados. Reservado

En la misma sartén  añadimos un pelín más de aceite y ponemos un puerro y una cebolleta muy picaditas y a que se pochen a fuego lento hasta que estén trasparentes.

El sofrito de puerro y cebolleta

Cuando hayamos logrado nuestro objetivo le añadimos el pollo que teníamos reservados, una cucharada de pimentón dulce, una cucharada de orégano  otra de comino, paprika al gusto y un buen chorreón de mostaza. Removemos todo y le damos unas vueltas para que todo se impregne bien.

Todos los aditivos prestos a mezclarse.

Apagamos el fuego y ponemos la mezcla en un colador durante un ratito para que suelte el exceso de aceite.
Escurriendo para quitarles el aceite

Este es el momento en que mi señora y un servidor se han largado a tomarse un par  de cervecitas con caracoles al bar Proto (Alcalde Manuel del Valle, en el grupo de pisos de  las Naciones) donde los ponen de muerte: hermosos, todos con el bicho fuera, picantitos, con sabor a yerbabuena, vamos, una autentica locura. De camino me he subido una tarrina grande para la cena, por eso de no dejarse ir el cuerpo.

De vuelta a casa retomamos la faena. 

Coger dos obleas de La Cocinera, rellenarlas con la masa y sellarlas con un tenedor.

Montando las obleas. Que se note la generosidad

Pintarlas con huevo batido para que luego cojan un bonito color en el horno.

Picasso de brocha gorda pintando con amarillo de huevo

Preparar la placa pintándolo de aceite y con una somera capa de harina para que las obleas no se peguen y sobre ella ir colocándolas amorosamente.

En la placa prestas a entrar el abrasador horno

Al horno con ellas. Yo lo pongo a 200º entre cinco y siete minutos. Sacar y servir calentitas.

En la bandeja prestas a entrar en las ávidas bocas.

No os cuento como acabó la fiesta, pero supongo que os lo imagináis.

Si os ha gustado la receta no podéis de dejar de pegarle un vistazo a la original de mi amigo Diego, eso si que es un  lujazo de fotos y no las porquerías mías. 

3 comentarios:

  1. Te agradezco muchísimmo Ricardo el homenaje que le has hecho a mi receta de empanadas y la verdad que se ve que hasta has superado mis esfuerzos. Te mando un abrazo enorme desde Buenos Aires!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Diego, ya me gustaría a mí tener un ápice de tu sapiencia culinaría

      Eliminar
  2. Esta receta esta ñam ñam!! ... que ricas me han salido!

    ResponderEliminar

SI HAS LLEGADO HASTA AQUÍ, HAZ UN COMENTARIO. ME ALEGRARÁS EL DÍA Y NO DUDES QUE TE CONTESTARÉ, AUNQUE SÓLO SEA PARA DECIRTE "GRACIAS AMIGO"